Jamás te rindas llegaras muy lejos
Relato Motivacional – Jama te rindas
Jama te rindas, se fuerte por que tu al igual que este muchacho llegaras muy lejos.
Bueno amigo el día de hoy les traigo una historia que les va a dar fe, fuerza, esperanza y les va a cambiar la vida.
Esta historia esta basada en la vida cotidiana que muchas personas la viven día tras día.
Pues bien, este es el caso de un payasito que dadas las circunstancias tuvo que salir a la calle a buscar un trabajo.
Pero en vista de que no lo consigue.
El se apega a realizar el trabajo de payasito malabarista en un semáforo de la ciudad.
Su atuendo no era el indicado, pero hacia su mayor esfuerzo.
El se vestía con su pantalón con tirantes y una camiseta y sus zapatillas casuales que siempre las utilizaba.
Se pintaba su rostro y se dibujaba una gran sonrisa para asi ocultar todos sus problemas.
También se ponía su peluca y una gorra.
Tomaba en las manos sus tres naranjas y cada vez que el semáforo se ponía en rojo.
Pues el salía la mitad de la calle y hacia su número.
Con la única intención de sacarle una sonrisa a las personas y a cambio de eso que le den unas cuantas monedas.
Para asi poder ayudar a su mama con los gastos de la casa.
Es decir, hacia malabares con las tres naranjas, claro que no siempre le salían bien pero el hacia su mejor esfuerzo.
Y con una sonrisa el alegraba el día a los conductores.
Había algunos conductores que le daban unas monedas.
Sin embargo, existían muchos tanto conductores como personas que pasan por ahí que no le daban apoyo.
Tal cual sucedió este día resulta que el estaba haciendo su número y de repente pasa una pareja.
Y entre ellos se dicen mira otra vez está aquí este payaso que no tiene gracias.
Yo no sé qué es lo que viene ha hacer el aquí si no tiene ni gracia.
Entonces la pareja se le queda mirando y le ice oye tu payaso ven acá.
El payaso muy emocionado y como siempre mostrando una gran sonrisa les dice dígame.
En eso el señor le dice tu qué haces aquí que no aves hacer otra cosa.
Tu no tienes gracia para ser un payaso ándate de aquí solo interrumpes el paso.
Entonces el payaso le dice deme una oportunidad y vera como le saco una sonrisa. Jama te rindas
La pareja le responde esta bien pero solo una oportunidad.
El payasito muy entusiasmado les dice les voy a contar un chiste.
En eso el empieza a decir:
Haber que le dice una piedra a otra piedra.
La pareja se mira entre si y dice no lo sabemos, a ver que le dice.
Y el payaso les responde:
Nada por que las piedras no pueden hablar.
Entonces la pareja muy molesta le dicen oye payaso tu no sabes contar chistes.
Sale, sale de aquí otra vez tu y tus chistes amargos.
Mejor no pierdas el tiempo y vete de aquí y seguidamente la pareja continua su camino.
Y el payaso se queda muy triste y se siente en la acera y se pone a pensar porque la gente me trata mal.
La gente es muy injusta conmigo porque será que me tratan asi yo solo quiero ganarme la vida honradamente. Jama te rindas
Y pues como era de esperarse el payaso muy triste recoge sus cosas y se va a su casa.
Llega donde su mama y le dice:
- Hola mami
Su mama le recibe con una gran sonrisa y le dice:
- Hola, hijo como te fue hoy.
Y el payaso le responde:
- Mal mama muy mal este día no hubo mucha gente colaboradora y en especial, una pareja me trato muy mal.
Entonces su madre muy conmovida le responde:
- Tranquilo hijo no te preocupes ya veras que todo va a ir mejor.
Luego de eso pasa un tiempo y aquel payaso estudia, se prepara y se supera convirtiéndose en un gran empresario.
Y va en el auto con su trabajador de camino a la empresa y pasa por aquel semáforo en donde un día le humillaron.
Y el muy conmovido le cuenta su historia a su trabajador, entonces su trabajador muy desconcertado le dice jefe.
No le puede creer que usted haya trabajado en los semáforos y de repente se le pone en frente una pareja de mendigos.
Y le piden que les de una moneda a cambio de una canción.
En eso el señor les reconoce y dice yo a ustedes los conozco.
La pareja muy confundida dice:
- De donde nosotros a usted no le habíamos visto antes.
Entonces el señor les dice:
- Se acuerdan de aquel payaso al que ustedes humillaron un día, pues ese payaso soy yo.
La pareja muy arrepentida le pide perdón y aquel señor les responde únicamente con estas palabras:
Tranquilos yo no tengo nada que perdonarles no se preocupen, mejor súbanse al carro y vamos los invito a comer.
Jamás discrimines a la gente ni tampoco la hagas sentir de menos – Jama te rindas
Porque la vida da muchas vueltas y como dice un gran dicho conocido el mundo es un pañuelo.
Y cuando menos te lo esperes vuelves al lugar en donde una vez humillaste a alguien.
Asi que de ahora en adelante cada vez que veas a una persona en un semáforo.
Haciendo tonteras como muchos lo llaman.
Siempre recuerda que esa persona se esta ganando la vida de una manera honrada. Jama te rindas
Y mas aun si es un payaso que esta con su cara pintada porque tu no sabes que es lo que calla y oculta.
Tras su maquillaje de payaso para sacar una sonrisa a las personas y asi ganarse el día.
Porque esa persona puede tener muchos problemas o puede estar pasando por una situación difícil en su familia.
Asi que no la insultes ni la discrimines, mejor muestra tu educación y se humanista y apoyala.
Ya que es asi como el o ella se gana la vida y para asi poder llevar un sustento a su casa y mantener a su familia.
Pero recuerda siempre que aquella persona no sale a la calle a robar ni hacer daño a nadie sino mas bien a trabajar honradamente.